Inquilino

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Tengo 29 años y estoy casado, tenía una casa en Narmak que le alquilamos a una pareja joven y el alquiler y el dinero lo pagó por adelantado la hermana de nuestro inquilino, pero no la había visto hasta ahora. Unos meses después del contrato de arrendamiento, nuestro inquilino me llamó a mi celular y me dijo cómo podía obtener una copia impresa de las llamadas telefónicas, así como de las llamadas que nos hacían y lo orienté. Tiempo después, me pidió que imprimir de nuevo. Y le habló de sus sospechas a su esposa y lo vergonzoso que es. Llamé a diferentes temas y hablé con su esposa y ella me habló muy formalmente.

Hasta que un día fui a Narmak y le dije que fuera al departamento a ver si no había problema, fui y llamé a la unidad, me presenté y dije que había venido a medir el espacio de la cocina para cambiar los gabinetes. nunca la había visto antes. Una mujer de 20 años, de mediana estatura, cara redonda, cara blanca, ojos negros y diablo estaba parada en una carpa blanca frente a mí. Dejé de hablar y entré a la cocina para revisar el gabinete y medirlo. Estaba ocupado hasta que vino a hacer té en la cocina y estaba de espaldas a mí. Lo estaba mirando desde atrás cuando de repente se agachó del gabinete y tomó algo. Cuando se levantó, su falda y la carpa se había ido a la línea de la esquina y me estaba haciendo estallar. Lo estoy mirando, se sonrojó. Y sonrió con frialdad, pero como su pecho estaba lleno, la parte superior de su tienda estaba abierta, y pude ver la blancura de su pecho. Le dije a una mujer de tu edad que era poco probable que conociera todo el sabor y la limpieza que usaste en la casa. En resumen, el hielo se derritió y comenzamos a elogiarnos. Van Gahmon se enredó y tomé el terrón de azúcar y miré frente a él y lo llevé a sus labios. Sacó la lengua y hundió las nalgas entre mis dedos. Unos momentos después, nuestros labios estaban cerrados. Su tienda se había caído. Mi camisa estaba rota. Empecé a comerle el cuello y lentamente le quité el top, la acaricié y me metí en la boca a sus hijas, se pusieron rojas y gritaban que no fuera demasiado pronto, mi marido se acordó de mí, se lo puso en la mano. Estaba gritando, "¡Oh, ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh saber el tamaño de una persona, ¿cómo es ahora? Dije exactamente el tamaño de la crema, pero estamos celoso de su marido. Me despedí y fui, pero el problema no iba a terminar aquí. fue muy real

Fecha: Febrero 22, 2018

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